Una semiosis infinita
Qué es el mundo?
Un gran globo
terráqueo donde el norte está arriba y el sur, abajo.
Siete
millones y medio de seres humanos y quién sabe cuántos animales – muchos en
extinción- convierten a ese gran globo en un organismo que late cada vez más
lejos de las vibraciones propias de la Pacha.
En nuestro
continente tenemos nuestro propio globo, un globo de ensayo que cíclicamente se
desinfla al compás del neoliberalismo : se profundizan las
desigualdades y, a continuación, se eleva un
poco en el marco de lo que algunos llaman despectivamente gobiernos
populistas mientras los grandes medios no dejan de configurar el pensamiento de
la ‘gente’ en función de sus intereses hegemónicos.
Ciro Alegría
escribió la novela ‘El mundo es ancho y ajeno’ y don Ata cantó que
‘las penas son de nosotros; las vaquitas son ajenas ‘.
Mundo’
triste, solitario, ¿final’?
Según desde
donde se lo mire, mundo puede asociarse a universo, cosmos, al otro
mundo…
En lo
cotidiano, el mundo suele vincularse a lo que piensa o hace ‘todo el mundo’, un
cuantificador hiperbólico o al mundo del barrio, al personal o al íntimo en
esto del refrán: ‘Cada casa es un mundo’.
‘Hubo
un tiempo que fue hermoso’, el sueño de cambiar el mundo,
‘la imaginación al poder.
Pero se nos
vino el mundo abajo y al día de hoy, el globo nunca tan globo y la desigualdad
nunca tan brutal.
Orwell expuso
la vulnerabilidad de los humanos y la cuestión
del control absoluto, el miedo que produce y el castigo a quienes se
rebelen, en sus novelas ‘La guerra de los mundos’, ‘1984’ y
‘Rebelión en la granja’.
La lista no
puede omitir a “Un mundo feliz” de Aldous Huxley, “Fahrenheit 451” de Ray Bradbury y “La naranja mecánica” de Anthony Burgess
Las ficciones
distópicas han sido textos de anticipación que no eludieron temáticas
sociales y políticas, la negación de ‘el hombre naturalmente bueno’ de
Rousseau, del mismo modo que la novela negra las exploró a través de otra
manera de contar.
Vale incluir
un cuento de Borges, ‘El informe de Brodie’, sátira que narra la
historia de los Yahoos, sociedad extremadamente cruel, carente de
pensamiento abstracto y de memoria. Brodie dice: “La falta de imaginación los
mueve a ser crueles”.
Un tema
recurrente en la literatura a la que hemos aludido es el Estado
policial que nos remite inmediatamente al tan transitado tema de la seguridad.
Llegados a
este punto habría que discurrir sobre las diversas connotaciones que este signo
entraña.
De lo que no
cabe duda es que a mayor desigualdad, más se agita el fantasma de la
inseguridad porque lo que subyace es la idea de reprimir la
protesta. Conviene manipular a la doxa estimulando miedos y odios para mantener
la granja tranquila y convencida de que la mano dura es
para los que ‘se portan mal’.
Un mundo
binario de buenos y malos, vagos y meritócratas, la biblia y el calefón…
Es así como
amplios sectores creen que los derechos humanos no son para tod@s,
sino para los ‘derechos y humanos’ del mondo cane.
Y el mundo
sigue andando aunque muchos ojos se cierren para no ver y muchos oídos den
crédito a la ‘verdad’ de las fake news.
El mundo
podría ser, acaso, un inmenso huevo donde florezca la
vida plena antes de que una humanidad fuera de sí, lo
aplaste y lo desintegre. Esto es ya una utopía que
nos remite a la célebre obra homónima de Tomás Moro.
La semiosis
infinita invita a seguir y no hay manera de ponerle punto final a esta
reflexión. Quizá continuabrir de nuevo
“Hay cosas
encerradas dentro de los muros que, si salieran de pronto a la calle y
gritaran, llenarían el mundo.” Federico García Lorca
Pintura de Frida Khalo
* Semióloga
Tapa tomada de Alamys