Messi: de “pecho frío” a “hombre vulgar” (La historia del Topo Gigio)

La selección argentina ha pasado a las semifinales del Mundial de fútbol que se disputa en Qatar al vencer por penales a Países Bajos. Tras ir ganando por dos goles, en un partido de trámite infartante la “Scaloneta” logró superar el golpe anímico producido por el empate en el último minuto del larguísimo alargue  otorgado por el árbitro español. Lo cierto es que a esta altura del certamen si algún rasgo hay para destacar del equipo argentino es su capacidad para sobrellevar situaciones adversas. Una virtud que sin dudas se apoya en la cohesión grupal, condición eminente para un deporte de conjunto. En este aspecto se hace perentorio destacar la figura de su capitán Lionel Messi, el mejor jugador del mundo y alrededores. Un líder cuya presencia y modo de habitar el campo de juego propicia que sus compañeros entreguen lo mejor de sí. Doquiera reciba la pelota Lío la hace circular de modo tal que el balón encuentre los resquicios por donde quebrar la defensa rival. Una suerte de magia que el primer gol ante Países Bajos -al cargarse la presión de tres contrarios para luego servir un pase exquisito a Nahuel Molina-, ilustra de manera contundente. Esta habilidad técnica no podría llegar a buen puerto sin la convicción anímica que el carácter agonístico [léase lucha] del juego impone. No por nada, Messi logró ganar siete Balones de oro y aquilatarse cuanto campeonato había para disputar con el Barcelona. Sin embargo, con la selección el título recién llegó el año pasado al ganarle a Brasil la final de la Copa América en el mismísimo Maracaná. Razón por la cual cierto sector de la prensa hegemónica – el mismo que condenó el carácter apasionado de Maradona cuantas veces pudo- lo tildó de “pecho frío”. “Síndrome de Asperger” le diagnosticaron algunos y hasta un neurólogo con aspiraciones presidenciales le adjudicó –para vergüenza de todo el mundo psi- “miedo a ganar”. Las críticas llegaron a tal punto, que tras la derrota en la final de la Copa América ante Chile en 2015, Lionel decidió abandonar la selección Vale recordar que para ese entonces de la mano de Messi Argentina había llegado a la final del Mundial 2014 en Brasil, cuando nuestra selección perdió frente al equipo alemán, el cual si bien no contaba con raza superior alguna supo meter el único gol del partido en el segundo tiempo del alargue.

Aunque cueste creerlo, hoy que Argentina se encamina hacia las semifinales de manera decidida; Messi ha dejado de ser un “pecho frío” para ser criticado por sus gestos y cruces de palabras con los jugadores y el cuerpo técnico de Países Bajos. “Hombre vulgar” lo tildó el diario La Nación cuya línea editorial defiende de manera abierta a Macri, el Ceo ex presidente que arruinó al país Es que entre los gestos del capitán argentino durante el trámite del partido figura el “Topo Gigio” que Juan Román Riquelme le dedicó a Macri -con quien estaba enfrentado- en más de una oportunidad. Por otra parte, la historia cuenta que cuando el actual técnico holandés dirigía al Barcelona (esto es: mucho antes de que Messi se convirtiera en el astro del club catalán), Van Gaal perjudicó con sus directivas a Juan Ramón Riquelme, que en ese momento jugaba bajo sus órdenes. El “Topo Gigio” es entonces no solo una respuesta al técnico de Países Bajos -que en la previa había elegido formular comentarios con el fin de enrarecer el juego, tal como la actitud patotera de su dirigidos lo demuestra- sino también una reivindicación al legendario volante de Boca. Por lo demás el diario que salió a criticar a Messi por “pendenciero” defiende a Macri. Que cada uno saque sus conclusiones.

*Psicoanalista. Doctor en Psicología por la Universidad de Buenos Aires. Profesor Nacional de Educación Física. Ex entrenador de equipos deportivos.