Con un manejo omnipresente de los Medios de in-comunicación, un grupo de personas se convocó el 25 de mayo, luego el 20 de junio, el 9 de julio y ahora el 17 de agosto. Fiestas patrias para realizar un “banderazo”.
Son los mismos que decían que la pandemia no era tal hasta que los gobiernos flexibilizaron y empezaron a gritar la irresponsabilidad del presidente (no de los demás gobiernos, salvo Kicillof, que empieza con “K”). Son los mismos que cuando se avizoraba una vacuna empezaron a denostar la vacuna rusa (parece que hay vacunas comunistas, cosa que yo no sabía), y que cuando el gobierno anunció la fabricación en el país de la vacuna de Oxford empezaron a hablar de “negociado” o a cuestionar al empresario que la fabricará (ya que el amago de atribuir a Macri la presencia del laboratorio duró lo que un suspiro… o menos). Son los mismos.
Los mismos que ahora parecen patriotas después que destrozaron, aniquilaron, mancillaron y vendieron la patria. Son los mismos que tan patriotas son que sacaron a los grandes personajes de los billetes para poner animalitos. Y lo explicaban diciendo que “ahora hay seres vivos” en ellos. Pero ahora, después que una bandera golpeó al ex presidente y que el día de la bandera el monumento estuvo vallado, ahora convocan a “banderazos”. “La patria está en peligro” (dicen, atrasando 4 años).
No a los sueldos de los políticos, no a la liberación de presos, no al comunismo, no a la cuarentena, no a la reforma judicial, no a la expropiación de Vicentín, no a… solo no, todo no… así de positivos son. Con un ladrillo por cada “no” han levantado un muro, ya que la grieta no les dio resultado y se transformó en trinchera. Los muros – en general – tienen mala prensa, desde el de Berlín pasando por el de Jerusalén, terminando con el de Trump. Juntarán gente, o no. No serán mejores por eso, ni más positivos, ni menos idiotas útiles. Serán simplemente eso: un grupo de personas (y estoy siendo generoso) llenas de odio e ignorancia. ¡Peligroso cóctel ese! Entre tanto, otros. Miles. Tratamos de vivir y sobrellevar estos momentos en paz, aburridos, pero llenos de esperanza. Queremos vivir, ¡si no les molesta!
Recuperó puntos Trump y está cerca de Biden; Bolsonaro sube la imagen positiva... ¿Y nos extraña que vaya gente al obelisco?
* Teólogo. Integrante del Grupo de Curas en Opción por los Pobres.
Fuente: Blog 1 de Eduardo de la Serna